¿En qué consiste el programa del niño sano?
Una de las claves para tener una buena salud como adultos es la prevención de la enfermedad en los más pequeños.
Y, obviamente, para prevenir las posibles enfermedades de los niños, es fundamental observarles y tratarles mientras estén sanos.
El Dr. Adolfo Ortega, Pediatra de Hospital Juaneda Muro, nos ha explicado en qué el programa del niño sano, un programa que se desarrolla con calidad y mucha calidez desde todos los centros de Juaneda Hospitales.
Se trata de un programa por el que se hace un seguimiento de todos los pacientes pediátricos de manera regular —una visita al mes— durante el primer año de vida. Visitas que, como el propio nombre del programa indica, se hacen siempre con el niño sano.
Se controlan todos los aspectos del desarrollo, tanto psicomotriz como físico, durante el primer año de vida ya que es el mejor momento para incidir en los buenos hábitos. Y, además de velar por la salud de los niños, es un programa que brinda una valiosa ayuda a los padres en el momento en el que están más perdidos y vulnerables.
Cada mes con el apoyo del cuadro pediátrico tanto en el tema de la puericultura como en el tema sanitario y de desarrollo.
La idea fundamental es conocer bien a todos los pacientes para poder proporcionar el concepto de pediatra de cabecera. Un guía para los niños. Una figura que siempre está al tanto y que sabe cuándo los niños están bien o mal, un referente que conoce el entorno familiar, escolar y todas las circunstancias alrededor del niño que afectan al desarrollo de su vida.
El objetivo principal es tener un concepto integral del niño en todas las esferas de su vida. No sólo en la parte médica, que también, sino que el hecho de visitar al niño tantas veces mientras se encuentra bien, será mucho más fácil detectar cuando está mal.
En ocasiones, el pediatra de cabecera llega a detectar problemas o anomalías en los niños que ni siquiera sus padres habían detectado. Ese es el fruto de las visitas periódicas y frecuentes que se realizan durante los primeros años de vida y que les permiten conocer profundamente a cada paciente.
De hecho, según confirma el Dr. Adolfo Ortega, uno de los momentos más duros de su carrera es tener que despedirse de sus pacientes tras 14 años de verles crecer.
Al igual que para sus padres, para sus médicos siempre serán aquellos bebés que vimos crecer.
Juaneda, cerca de ti.
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