Alternativas a la fuente de la eterna juventud: peeling químico
Entre los 35 y 40 años la elasticidad y tersura del rostro van cambiando. La producción de elastina y colágeno ya no es la misma, y las sonrisas, fruncimiento de ceños, guiños e incluso muecas empiezan a dejar una huella en la piel.
La fuente de la eterna juventud aún no ha sido localizada, pero es posible hacerse con unas dosis de lozanía extra, gracias a la medicina.
La Dra. Margarita González-Onandía, licenciada en Medicina por la Universidad Complutense de Madrid, especialista en Cirugía General y del Aparato Digestivo y en Medicina Estética, forma parte de la Unidad de Cirugía Plástica de la Red Asistencial Juaneda. Según su experiencia, hay que “utilizar el sentido común y no abusar de los tratamientos” ya que esa es la clave para conseguir los mejores resultados.
Qué es un peeling químico
El significado literal de peeling es “pelar”. Según explica la doctora, se trata de “barrer toda la piel oxidada, con manchitas y con defectos degenerativos. Es una exfoliación en la primera capa de la piel que provoca, primero una inflamación aguda, y luego una consecuente regeneración celular y, por tanto, la reparación cutánea”.
La piel rejuvenece porque se ha renovado, y aparece nueva, con los poros cerrado, sin manchas, y con una calidad y textura muy mejorada.
El milagro lo produce el ácido tricloroacético , un sólido incoloro y cristalino que se disuelve en una solución líquida. “El ácido se disuelve en dos concentraciones, al 15% o al 30%, dependiendo del tipo de la piel en que se va a aplicar”.
Así se hace un peeling químico
Según explica la doctora González-Onandía, cada persona tiene un tipo de piel y unos condicionantes, como las manchas por la foto exposición, las expresiones faciales, la piel oxidada por el tabaco o la propia edad del paciente.
El peeling químico que se aplica en Juaneda Hospitales siempre tiene en cuenta las características particulares de cada tipo de piel.
El tratamiento es muy sencillo. En primer lugar, se aplica una crema protectora en las mucosas y zonas más sensibles de la cara, y a continuación y con la ayuda del pincel, se administra la solución de tricloroacético, realizada en el porcentaje adecuado al paciente. La operación se repite hasta en tres ocasiones y finaliza con un tratamiento con ácido hialurónico calmante e hidratante que actuará durante diez minutos.
“Este tratamiento es excelente, lleva agentes activos que contrarrestan los efectos secundarios del ácido, tiene agentes antioxidantes protectores contra los radicales libres y estimula la producción de colágeno a un nivel muy profundo” explica la doctora.
Y es que el peligro de los peelings es que a veces provocan quemaduras. Pero en el caso del peeling químico que se realiza en Juaneda Hospitales, el ácido está formulado de tal manera que contrarresta los efectos erosivos sin perder efectividad.
Una vez finaliza la sesión el paciente puede hacer vida normal. En un período de tres a cinco días la piel de la cara experimentará una descamación progresiva que llevará a la regeneración cutánea. Es en estos momentos en los que, más que nunca, hay que aplicar protección solar, para que la piel que nace nueva quede tersa y luminosa.
En Juaneda Hospitales se llevan a cabo varios tipos diferentes de tratamiento para paliar los efectos del envejecimiento. En esta entrada se recoge más información sobre el tema.
Juaneda, cerca de ti.