Cómo afecta el calor a la calidad del sueño
El edredón nórdico del que nos cuesta salir durante los meses de frío deja paso a las calurosas noches de verano en las que a muchos les cuesta conciliar el sueño.
Los grados centígrados empiezan a subir y, con el calor, el 25% de la sociedad llega a padecer insomnio.
Dormir bien es fundamental para descansar y rendir durante el día, pero también es muy importante para evitar dolores de cabeza matutinos o sufrir un carácter irritable y depresivo.
La Dra. Rosa Serra, neumóloga y coordinadora de la Unidad del Sueño de Clínica Juaneda, indica que son muchos los factores que nos alejan del sueño placentero. Por ejemplo, las elevadas temperaturas, el aumento de las horas de luz o el inevitable cambio de hábitos de verano.
Sin embargo, hay una serie de pautas que podemos seguir para tratar de paliar ese trastorno:
1. Ventilar la habitación de forma natural durante las primeras horas del día y también durante las horas previas a la hora de dormir.
2. Tratar de mantener el mismo horario durante todo el año.
3. Evitar dormir siestas de más de 30 minutos.
4. Hacer deporte preferiblemente en las primeras horas del día. El ejercicio aumenta la temperatura corporal y activa el cuerpo.
5. Evitar las cenas copiosas y tardías.
6. Atenuar la luz y evitar los ruidos en la habitación.
7. Usar ropa de cama fresca como el algodón o el lino.
8. Evitar el aire directo de los ventiladores o el aire acondicionado.
Si después de tomar todas estas precauciones el insomnio persiste, es muy importante acudir a la Unidad del Sueño para poder diagnosticar y tratar de manera personalizada las alteraciones del sueño.
En Juaneda Palma contamos con más de diez años de experiencia y una tasa de más del 90% de éxito en los tratamientos.
Juaneda, cerca de ti.
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