Enfermeras y médicos de Juaneda se forman para potenciar la donación de órganos
• España es líder mundial en donación y trasplantes
• Se calcula que unas 5.000 personas están en lista de espera. Según datos de la Organización Nacional de Trasplantes, aproximadamente un 10% de los pacientes muere a la espera de recibir un trasplante.
No hay ninguna actividad médica ni quirúrgica que pueda beneficiar a tantos pacientes a la vez, como la donación. Éste es el principal motivo por el que se convierte en una de las prioridades de Juaneda. En los últimos años ha ido cambiando el perfil del paciente, con donantes que son cada vez más mayores y con resultados de donación que colocan al estado en los puestos de cabeza de toda Europa.
La recién nombrada coordinadora adjunta de este programa, Natalia Valles, lidera esta apuesta del grupo hospitalario Juaneda después de haber completado un riguroso programa de formación, en el que se destaca el curso internacional en coordinación de trasplantes que se imparte en Sant Hilari Sacalm (Barcelona) además de jornadas de donación para profesionales de urgencias. Consciente de la importancia de la formación continua participará en breve del Master internacional en donación de órganos, tejidos y células para el trasplante –un master en el que participan sólo 20 profesionales de todo el mundo-.
El objetivo del programa de formación que se lleva a cabo en Juaneda es el de aumentar el número de donaciones. Dirigidas a enfermeras, auxiliares, médicos e intérpretes ya se han celebrado cinco acciones entre charlas y sesiones informativas, en las próximas semanas están programadas dos más, una de ellas en el Hospital General de Muro. Lo que se busca es informar y concienciar sobre las últimas novedades en donación y preparar a los especialistas ante posibles casos. Al igual que Juaneda, Valles tiene claro que:”el principal motor que impulsa este proyecto es la voluntad de poder contribuir a aumentar el número de donaciones, que tradicionalmente han tenido poca presencia en la sanidad privada y que son tan necesarias para los pacientes en lista de espera para trasplante”.
Cada vez que se dona, se puede llegar a salvar más de 55 años de vida. Natalia Valles destaca que el tiempo se convierte en elemento clave de la donación: “una donación es un trabajo en equipo que debe estar perfectamente coordinado y donde la información es fundamental. Una vez se ha hecho lo máximo posible por nuestro paciente y la situación es irreversible y no podemos hacer nada más. Es el momento en el que se abre la puerta a la donación, porque si sus órganos entran dentro de unos criterios clínicos específicos, este paciente puede ayudar a muchas personas para los que a veces el trasplante es la "única" opción de vida que les queda. Y es en ese instante para el que tenemos que estar preparados, una de las charlas que imparto es la de “cómo dar malas noticias”.
No en todas las ocasiones la donación es posible, por eso ante cada caso se debe cumplir con un estricto protocolo previo. Una carrera a contrarreloj donde los especialistas deben revisar la idoneidad del donante potencial identificado por el médico, solicitar las pruebas adicionales que puede necesitar y cuando no presente contraindicaciones para el trasplante, organizar y coordinar la extracción de órganos. En palabras de Valles:“Cuando en el hospital tenemos un paciente donador potencial y una vez que se ha hablado con su familia y están de acuerdo con la donación, se pone en marcha el dispositivo. Primero se empieza con los cuidados para mantener los órganos en buen estado y se organiza el traslado al hospital extractor que en Baleares es Son Espases. Allí se finalizaran las pruebas y examinarán las compatibilidades de los posibles receptores con el donante, siguiendo una rigurosa lista de espera y de gravedad de la personas que esperan un órgano.
En Mallorca se hace trasplante renal, con lo cual si hay un receptor compatible será operado en pocas horas. Para la extracción del resto de órganos, se desplazarán los equipos médicos que se van a encargar de implantarlo en los receptores. Eso conlleva que si en Mallorca hay un donante y su corazón es compatible con un paciente que está ingresado en Madrid, será este equipo el que se desplace hasta la isla, teniendo en cuenta que tiene un plazo de 6 horas desde que se extrae el corazón y se trasplanta al receptor. Y el mismo protocolo con cada órgano compatible, a lo mejor el hígado se irá a Sevilla y los pulmones a Barcelona, es por ello que cada vez que hay un donante se movilizan mas de 100 profesionales, es un trabajo en equipo con un objetivo muy claro y firme: salvar vidas”.
En poco tiempo ha cambiado el perfil del donante, si lo habitual eran casos por accidente de tráfico, estos se han reducido en los últimos años y hoy la causa más frecuente son las hemorragias cerebrales que no se pueden operar, que tienen muy mal pronostico y que finalmente producen la muerte cerebral del paciente. Valles destaca también el aumento de la edad del donante y asegura: “los donantes son cada vez más mayores, pero lo bueno es que sus órganos se pueden encontrar en perfecto estado y son óptimos para la donación. Existen casos de un donante de 60 años que puede salvar la vida de un paciente de 30 años, al que le urge el trasplante, porque su vida depende de ello”.
España es líder en donación y trasplantes, aunque lamentablemente a nivel mundial, 240.000 personas esperan un trasplante y entre el 6-8 % mueren en lista de espera. Con esta iniciativa Juaneda refuerza su compromiso con el circuito de donaciones y trasplantes de órganos del estado.
Fundada en 1917 y con sede en Mallorca, Juaneda es la primera red hospitalaria privada de Baleares. En la actualidad, Juaneda cuenta con una red de 4 hospitales (Palma de Mallorca, Muro, Ciutadella y Mahón), 40 centros sanitarios y más de 1.000 empleados. En 2012 la compañía registró 45.000 estancias clínicas, 15.000 intervenciones quirúrgicas y 130.000 urgencias.