«El deep learning de la IA, imitando un cerebro humano en las nuevas resonancias magnéticas, facilita una predicción más precisa del crecimiento del cáncer ginecológico»

El Dr. Albert Reyes Claret es un ginecólogo de Juaneda Hospitales, altamente especializado en cirugías oncoginecológicas complejas por procedimientos quirúrgicos mínimamente invasivos. El Dr. Reyes asume casos quirúrgicos especialmente complejos, derivados por otros especialistas. La llegada de las tres nuevas resonancias magnéticas, instaladas en Clínica Juaneda (1) y en el Hospital Juaneda Miramar (2), las primeras con IA en Baleares, han supuesto una revolución en la mejora de una atención ya de por sí de alta calidad. La potencia de los nuevos equipos, con herramientas de Inteligencia Artificial, permiten, tal como explica el Dr. Reyes en esta entrevista, una mucho mayor precisión en la determinación de la frontera entre tejidos sanos y tejidos afectados por el cáncer que se está tratando, lo que aumenta exponencialmente las probabilidades de éxito quirúrgico y de el mejor de los pronósticos para las pacientes, preservando mejor los órganos cercanos. 

—¿Qué importancia tiene la alta tecnología de la resonancia magnética (RM), incorporada por Juaneda Hospitales, en la cirugía oncoginecológica compleja que usted desarrolla? 

—La resonancia magnética es una herramienta fundamental en el diagnóstico de los tumores ginecológicos, así como en la planificación quirúrgica de los mismos. Desde siempre nos ha aportado muchísima información, bien sea en cuanto sobre la invasión del tumor en la profundidad del músculo uterino, la diseminación hacia los ganglios linfáticos etcétera. Es, por tanto, una herramienta que nos permite tanto conocer en qué fase se encuentra la enfermedad como planificar de una forma correcta el tipo de cirugía que necesita cada paciente. 

—Las nuevas RM de Juaneda Hospitales son las primeras de Baleares con herramientas de Inteligencia Artificial (IA). ¿Qué supone esto en su especialidad? 

—La incorporación de la IA en la resonancia abre una perspectiva importantísima en cuanto a una mejora de las prestaciones, tanto en la adquisición de imágenes como en la interpretación de las mismas. Nos va a permitir reducir los tiempos de la prueba para la paciente y generar imágenes de mayor calidad, que nos van a facilitar a nosotros, como cirujanos, poder determinar con mucha mayor precisión, qué tejidos pueden estar afectados, así como cuáles van a ser los márgenes de seguridad en cuanto a la frontera de eliminación de esos tejidos. 

—¿Cómo ayudarán estas nuevas tecnologías a conocer mejor la afectación de los ganglios linfáticos por donde pudiera extenderse la enfermedad? 

—Sí, el sistema linfático es una de las vías de propagación de los tumores sólidos y en el caso de los tumores ginecológicos es una de las principales vías de diseminación. Gracias el deep learning [el Aprendizaje Profundo o deep learning es una parte de la IA que enseña a las computadoras a aprender de grandes cantidades de datos, imitando la forma en que el cerebro humano procesa la información, mediante el uso de redes neuronales artificiales “profundas”] de la IA nos va a permitir generar un modelo predictivo para darnos una probabilidad mayor de conocer la afectación linfática. 

—Y eso será un gran beneficio… 

—Así es. Gracias a ello, en un futuro, vamos a poder limitar aún más la extensión de las cirugías. También, en casos ya más complicados de recaídas tumorales, que ya han sido tratadas quirúrgicamente y con tratamientos complementarios como la radioterapia, donde necesitamos hacer un rescate quirúrgico [nueva intervención para eliminar el cáncer que ha reaparecido], debemos conocer muy bien la extensión del tumor y ser muy precisos para la preservación de los órganos sanos vecinos al cáncer ginecológico, como pudieran ser la vejiga o el recto y saber si podemos salvarlos o no, con una seguridad oncológica garantizada. 

—¿Tienen las nuevas RM con IA otras aplicaciones en su ámbito, además de en patologías malignas?

—Así es. También existen enfermedades y procesos benignos, pero altamente complejos, como la endometriosis, la endometriosis profunda o casos de cicatrices uterinas previas, por poner algunos ejemplos, en las cuales necesitamos una reparación, con lo que la resonancia magnética nos va a permitir definir muy bien estos defectos y situaciones y nos va a ayudar muchísimo en cuanto a la planificación de la cirugía.

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